Al preguntarnos si el uso de criptomonedas nos impacta o no, debemos considerar dos perspectivas principales: la del usuario final y la de la organización que emplea esta tecnología.
Como usuarios de aplicaciones diarias, a menudo nos resulta indiferente qué tecnología subyace en los servicios que utilizamos. Generalmente, nos importa más que satisfaga nuestras necesidades específicas. En cualquier caso, es importante considerar qué información se requiere y cómo se usa, especialmente cuando es relevante para nuestra privacidad y seguridad.
En este punto, es importante diferenciar entre una blockchain privada (o permisionada) y una blockchain pública, así como el papel de la criptomoneda en cada una.
Blockchain Pública: Las criptomonedas, como Bitcoin y Ethereum, son vitales en las blockchains públicas. Funcionan como tokens, incentivando el uso y la seguridad de la red. Un proyecto bien implementado en una blockchain pública puede generar un impacto social positivo notable. Este impacto se debe principalmente a la descentralización, transparencia y accesibilidad financiera que proporciona. Sin embargo, factores como la adopción y la regulación también juegan un papel importante. Están más enfocadas a la web 3.0.
Modelo de descentralización en ambas blockchain
Blockchain Privada o permisionada: Aquí, la tokenización es una herramienta clave para representar activos digitales como acciones, bonos, propiedades inmobiliarias y obras de arte. Permite una gestión eficiente y transparente de estos activos. Las blockchains privadas, diseñadas para el intercambio de valor seguro y eficiente, pueden carecer de la descentralización y resistencia a la censura que ofrecen las públicas. Están más enfocadas a eficiencia empresarial como la trazabilidad o la identidad.
Ambos tipos de blockchain comparten características como la transparencia, inmutabilidad y seguridad de datos gracias a la criptografía. Sin embargo, difieren en la descentralización.
Las blockchains públicas funcionan con actores anónimos y, la descentralización es total, no hay nadie orquestando la maquinaria es autónoma. Las blockchain privadas no necesitan este nivel de anonimato, por tanto su nivel de descentralización es interna, a nivel de las empresas que forman un consorcio.
Para ambas, la trazabilidad de la información es esencial, asegurando la transparencia de los datos. Es importante destacar que las blockchains privadas también pueden emitir tokens para fines promocionales o de incentivo.
En definitiva, la relevancia y el impacto de las criptomonedas y la tokenización en blockchains públicas y privadas dependen en gran medida de cómo se implementen y se utilicen estas tecnologías., lo cual nos impacta a las personas en cuanto al uso que hacemos de ellas.
